8/11/09

Todo uno



Lo que había en mi pecho

se agitaba en el cielo

como un pez.

El espacio era agua dorada

y rosa.

Las plantas nadaban en mí,

los animales bebían.

Me convertí en un hombre petiso

con barba.

Me subí a un banquito.

Voy a nacer mañana, anuncié.

Tendré una vida finita,

a ver si puedo recordar quién soy

naciendo joven e inexperto.

Cómo sabes que volverás a ser tú?

preguntó una amiga

y se transformó en zapato.

Quizás me tome muchas vidas, respondí.

Pertenecía a un pie derecho invisible,

no me contestó.


Giselle Joandet



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